jueves, 17 de junio de 2010

Al tiempo...


Parar el tiempo es algo con lo que todas las personas han soñado alguna vez. Parar el cronómetro de nuestras vidas en el preciso instante de un beso. Parar el reloj de nuestra existencia cuando encuentras unos ojos soñadores que te miran.
Parar el tiempo es algo imposible; sólo cabe en nuestros sueños. Vivimos improvisando a cada momento. No existe marcha atrás: cámaras, luces y acción; nuestra vida comienza de esta manera. Pero no existen tomas falsas que puedas corregir.
Parar el tiempo es deseo infinito. La aparición de la fotografía permitió de alguna forma, retener en una imagen nuestras vivencias, nuestros besos, nuestros seres queridos; incluso la cara de esa niña de ojos soñadores que antes te miraba. Pero al mirar una fotografía siempre será pasado. No puedes recrearte en ese instante y hacerlo eterno. No puedes parar las agujas de nuestro destino ni apropiarte de tus vivencias eternamente.
Pero deseo parar el tiempo. Ahora, mientras escribo. Mientras veo a toda esta gente que al igual que yo busca su futuro; poder observarlos desde fuera, eso deseo.
Parar el tiempo es hablar de juventud, de eterna juventud. Algo tan imposible como detener el minutero cruel de nuestras, a veces, crueles vidas.
Esta es mi forma de parar el tiempo; retirándome a un rincón en donde ahora me encuentro; escribiendo para mí y para nadie...como tantas veces...
y me gustaría seguir haciéndolo ya que aún soy joven, y aunque no pueda detenerlo, por ahora me sobra tiempo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario